Varios son los compuestos presentes en la naturaleza de los cuales podemos echar mano para potenciar diversas funciones en nuestro cuerpo. En esta oportunidad nos enfocaremos en el ácido docosahexaenoico, mejor conocido como DHA.
¿Qué es el DHA?
El DHA es uno de los ácidos grasos poliinsaturados que conforman el omega 3. Éste ha sido ampliamente estudiado por la gran variedad de beneficios para la salud que provee, entre los cuales se encuentran los siguientes:
- Promoción del óptimo desempeño de la función de la vista y el cerebro.
- Protección para el sistema cardiovascular.
- Retraso del deterioro de la función cognitiva debido a la edad.
- Disminución de los síntomas de déficit atencional y síndrome de hiperactividad.
- Disminución de la ansiedad y depresión.
- Efecto antiinflamatorio.
¿Cuánto debo consumir para obtener esos beneficios?
Para obtener estos beneficios, la Autoridad en Seguridad Alimentaria de la Unión Europea recomienda un consumo de 250 mg diarios de DHA para adultos y niños mayores de 4 años.
¿En cuáles alimentos lo consigo?
El omega 3 y por ende el DHA, se encuentran predominantemente en el aceite de pescado y en menor proporción en huevos y productos lácteos. Sin embargo, en los últimos años ha aumentado el interés por el aceite del alga Schizochytrium sp, lo cual amplía el alcance de productos suplementados con este ingrediente dada su riqueza en DHA que pone sus beneficios al alcance de personas que no consumen alimentos de origen animal y también de aquellos que poseen alergias alimentarias al pescado. Este ingrediente posee además un sabor neutro, lo cual facilita su incorporación en una amplia variedad de alimentos preempacados.
Referencias Bibliográficas
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